Qué pena decía el joven artesano
luego de degustar las empanadas
jugos, pasteles, refrescos y café
en el quiosco del mirto y la cayena
y no cancelar lo consumido
Quizás, no le gustaron más
Porque no volvió a presentarse
Y pasa de soslayo
El joven, no pasa pena
pues es apuesto y varonil
y tiene bella pareja
El tiempo ha pasado
ojalá que el joven
No siga diciendo, que pena.
