Yacía cual arrugada flor
En su cama desvencijada
Luego de una noche romántica
Los haces de luna
Penetraban en su alcoba
E iluminaban parte de su bello rostro
Era la chica más atractiva
Del caserío adosado al torbes
Y a la pared vegetal
No solo los jóvenes del sector
Se extasiaban en su belleza
Otros venidos de los tejares
Acudían a conquistarla.
