Por la acera del frente
Pasa la encorvada viejecita
Con su cachucha volteada
Su vaso en la mano
Y su cava de vikingos
Saluda afectuosamente
A los que consigue con la mirada
Llamándolos compinche
El niño en la acera opuesta
La llama cariñosamente
Venga abuela, venga abuelita
La abuela. Le contesta
Bien mi niño querido
Que Dios te cuide
